Autor |
Mauricio Paredes
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Ilustrador |
Mauro Rodriguez |
Empaste |
Tapa Blanda
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Dimensiones |
1 x 13 x 20 cms.
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Páginas
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112 páginas
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Edad |
8 a 14 años |
Dos intrépidos hermanos, Delfina e Ismael, se ven en la necesidad de llamar a los bomberos cuando un pequeño fuego estalla en el armario de la señora Efluvia, seguido por la aparición de una misteriosa nota. Esto da comienzo a una intrigante búsqueda para descubrir el origen del incendio y develar la historia que oculta la nota. En medio de pistas enigmáticas y datos históricos, este relato rinde un homenaje al valor de los bomberos, en particular la Quinta Compañía de bomberos de Santiago, Bomba "Arturo Prat".
Una lectura que te sumergirá en un apasionante misterio por resolver.
Un libro que demuestra situaciones de riesgo y cómo se podría evitar que el fuego se salga fuera de control, para enseñar a niños y adultos a ser cuidadosos y estar siempre atentos.
«Detectives en llamas» es la nueva novela infantil de Mauricio Paredes, autor de más de 20 títulos, incluyendo «La cama mágica de Bartolo», «La familia Guácatela» y «¡Ay, cuánto me quiero!».
Fragmento del capítulo 4:
"Las llamas se propagaron rápidamente y fueron arrasando con todo a su paso, a pesar del enorme esfuerzo de los propios vecinos. Incluso el Intendente de la época, el almirante Manuel Blanco Encalada, participó en las tareas de salvamento.
- Me imagino la desesperación de esas personas sin tener bomberos a quien pedir auxilio -comentó Ismael.
- Exactamente, tanto que al día siguiente se hizo un llamado para organizar el trabajo de los incendios y el 30 de junio de 1851 se fundó el Cuerpo de Bomberos de Valparaíso. Así comenzó nuestro voluntariado.
- Todo partió aquí... —meditó Delfi.
- Así es. De hecho les puedo contar más. Uno de los fundadores de la Quinta Compañía de Bomberos de Santiago, Bomba «Arturo Prat» y su primer Capitán fue don
- Carlos Rogers Gutiérrez de la Fuente, que pertenecía a la
- Primera Compañía de Valparaíso.
- ¡En serio, Ruperto, tenemos que ir a encontrar las pistas!
Tal vez algo que los bomberos pasaron por alto, te aseguro que Siniestro Fulgor dejó escondida alguna señal —le suplicó la niña.